El jueves 3 de octubre “la lucha” comenzó en el cantón Pujilí, luego de que el Gobierno anunciara las nuevas medidas económicas y laborales. 

En las manifestaciones de la noche del miércoles 9 de octubre, fallece Inocencio Tucumbi, según el relato de los dirigentes indígenas, era oriundo de la parroquia de Zumbahua, provincia de Cotopaxi, y su deceso habría ocurrido tras ser arrollado.  

Jaime Pallo, dirigente de la comunidad Yanahurco de Juigua, en el cantón Puijilí, en Cotopaxi, de donde era oriundo el occiso, comenta sobre Tucumbi, que toda su vida trabajó allí; como jornalero, como agricultor y albañil.

Pallo dijo que Tucumbi fue impactado por una bomba lacrimógena. “Según la información que tenemos, yo no estuve ahí, él ha estado a altura de Salesiana y ahí es que le disparan directo y le dan un disparo en la cabeza. Nosotros salimos corriendo, cada quien se escondía donde podía. Los señores policías apuntaban al cuerpo”.

Geraldo Sacatoro, otro dirigente indígena, dijo que una parte del trayecto de 113 kilómetros de distancia lo recorrieron a pie; otros tramos avanzaron en camión, camioneta o cualquier vehículo que asomaba.

En los exteriores del Hospital durante la madruga de ayer, permanecieron los miembros de la familia y de la comunidad. Allí les confirmaron que era necesaria una autopsia antes de darle sepultura. 

Al sitio acudieron criminalística de la Policía, la Fiscalía y abogados de organizaciones sociales para verificar el procedimiento forense. “Estamos muy adoloridos. Llegamos el lunes para luchar contra el Gobierno que no quiere saber nada de nosotros. 

Ángel Tucumbi, de 27 años, hijo de la víctima dijo “Él murió por nosotros, por sus hijos y por su pueblo”. 

En una rueda de prensa la ministra de Gobierno, María Paula Romo, se refirió sobre este suceso. Afirmó que la causa de la muerte del ciudadano fue por una caída. "Tenemos la autopsia", agregó sin explicar las circunstancias se produjo tal caída.

Según los dirigentes indígenas, aseguran que la Policía había lanzado bombas lacrimógenas para despejar las vías cercanas al parque “El Arbolito”. Tucumbi habría caído y miembros de la policía montada pasaron le por encima con sus caballos.

El cuerpo del fallecido permanecía en el Hospital Eugenio Espejo, desde donde sus compañeros habrían hecho una calle de honor. Se dispuso que, para ingresar el cuerpo al Ágora, cuatro policías salgan a cargar el ataúd.

Otro de los fallecidos, cuyos restos no llegaron, es Luis Chaluiza, oriundo de la misma parroquia. “Estamos esperando terminar los trámites para retirar el cuerpo”, señalaron.