“Es hora de salir de ridículas guerras sin fin, muchas de ellas tribales, y devolver a nuestros soldados a casa”, sostuvo Trump en un mensaje en su cuenta de Twitter al justificar su anuncio de retirada de tropas de Siria, y remarcó que como es costumbre Washington solo librará batallas en su “beneficio”.
“Lucharemos donde sea por nuestro beneficio, y solo lucharemos para ganar. Turquía, Europa, Siria, Irán, Irak, Rusia y los kurdos tendrán que solucionar la situación, y ver qué quieren hacer con los combatientes capturados por el Estado Islámico (EI) en su ‘vecindario'”, dijo el mandatario.
El gobernante de manera sorpresiva anunció el domingo la salida de las tropas estadounidenses del norte de Siria ante la inminente operación militar de Turquía contra las milicias kurdosirias en esa zona, un ataque en el que Washington no quiere verse involucrado.
En una conversación telefónica el domingo por la noche entre ambos mandatarios, Trump prometió que sus cerca de 2.000 efectivos militares desplegados en la zona “no apoyarán ni se involucrarán en la operación turca” y tampoco permanecerán “en el área cercana”.
En la mañana del lunes, siguiendo las directrices de Trump, las tropas estadounidenses comenzaron a abandonar las bases y puestos de observación a lo largo de la frontera turco-siria, según mostraron agencias de noticias, información que confirmó el Observatorio sirio de derechos humanos.
Antes de partir en visita oficial a Serbia, el presidente Erdogan confirmó el repliegue estadounidense y advirtió de que la operación militar turca es cuestión de días, si no de horas: “Hay una frase que usamos siempre, podemos llegar cualquier noche, sin previo aviso”. “Estamos decididos a garantizar la supervivencia y seguridad de Turquía limpiando la región de terroristas”, tuiteó el ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu.
“Como dije antes, y solo para reiterar, si Turquía hace algo que yo, en mi gran e inigualable sabiduría, considero que está fuera de los límites, destruiré y aniquilaré totalmente la economía de Turquía”, dijo Trump en su cuenta de Twitter.
El reclamo de Turquía pòr una “zona segura” lleva años, ubicada en el noreste de Siria a lo largo de su frontera, una propuesta que finalmente se pactó el pasado 7 de agosto con Washington con el objetivo, entre otros, de reubicar a 2 millones de refugiados sirios que se encuentran en Turquía.
Ese territorio está controlado por las milicias kurdosirias, a las que Ankara considera "terroristas", y que están respaldadas por Estados Unidos, hasta hoy que las tropas estadounidenses les han dado la espalda y han comenzado la retirada de esa franja de seguridad, dando pie a que Turquía lleve a cabo otra de sus metas: ocupar el territorio del noreste de Siria y expulsar a los kurdos.