Ronald R. Rodríguez Barrios
Anaco.- Una de las exigencias fijas que hacen los anaquenses al alcalde Luis Guevara Marrón está
relacionada con las fallas en el abastecimiento de agua a las comunidades populares.
Es una constante en las quejas ciudadanas escuchar “queremos agua” o “se creen que somos
camellos”. Cierto es que el reclamo no es nuevo, pero sí que se ha intensificado.
A finales del mandato del exalcalde chavista Marcos Ramos ya se comenzaban a sentir los primeros
problemas con el suministro del líquido vital por la red de tuberías de la alcaldía de Anaco.
La situación se ha agravado dramáticamente en los casi dos años que Guevara Marrón tiene
ocupando la primera magistratura municipal. Mismo tiempo que suena la predecible excusa: “No
hay recursos” o “están de manos amarradas”.
San Joaquín, Buena Vista, 23 de enero, Vista Alegre, Caucagüita, La Esperanza, San Simón, El
Paraíso, Las Charas, Las Parcelas, José Antonio Anzoátegui, Francisco de Miranda y Valle Verde
reportan de manera constante que abren las tuberías y no sale nada.
“Guevara Marrón cumplirá dos años como alcalde y no ha logrado mejorar en nada el problema del
agua en Anaco” certificó Ofelia Pérez, quien considera a la actual administración municipal de ser
“negligente e inepta”.
La mujer de 30 años de edad asegura que “Anaco ha empeorado desde hace dos años para acá”
aunque entiende que “la situación económica nacional influye en la gestión”.
“Obvio que cada día es más difícil pero el alcalde está obligado a encontrar y dar respuestas
positivas a las comunidades, o de lo contrario que renuncien porque lo que están haciendo es ganar
sueldos sin hacer nada” indicó.
Pérez también criticó que desde el ayuntamiento no activen planes especiales de abastecimiento de
agua con camiones cisternas, o un programa de subsidio, que es lo que en casos de crisis suele
hacerse.
“Si la alcaldía no puede prestar el servicio lo lógico es que ingenie planes alternativos para llevar
agua a las comunidades” comentó Reina Chirinos. “No puede ser que los únicos que se favorezcan
con el gobierno local sean los adecos” lamentó.
“Los alcaldes anteriores mandaban camiones cisternas a las comunidades llenar dos tambores po
familia, no era mucho pero ayudaba un poco” recordó Chirino que afirma que los cisterneros cobran
“lo que les da la gana” porque “el pueblo está obligado a pagar para no morir de la sed”.